Monumento del Labrador

Monumento del Labrador (2019). Imagen: Diario La Hora.


Historia

Inaugurado a finales de la década de 1960, el popular monumento conocido como El Labrador fue ordenado al escultor Luis Mideros por el Municipio de la ciudad, especialmente para adornar con una pieza de arte el redondel que se formaría en la cabecera sur del antiguo Aeropuerto Mariscal Sucre, donde confluirían las ampliaciones de las avenidas 10 de Agosto y Amazonas que estaban en plena construcción.

Redondel del Labrador (1970).
Imagen: Osostudios.

Por aquella época, en este punto la ciudad urbana empezaba a dar paso a la suburbanidad de lo que hoy son los sectores de La Kennedy por el oriente y La Concepción por el occidente, así como la ruralidad más al norte de ellos. Y precisamente por esta razón, el concepto del trabajador del campo era perfecto para el monumento.

Fue una de las últimas obras realizadas por el célebre escultor ibarreño Luis Mideros Almeida (1898-1970), autor, entre otros trabajos, de la Puerta de La Circasiana que hoy se encuentra en El Ejido, el monumento a fray Jodoco Ricke en la Plaza de San Francisco, y el friso exterior del Palacio Legislativo.

Bautizado popularmente con el apodo de Los Bueyes, el monumento se convirtió rápidamente en el elemento más vistoso del paisaje urbano circundante, por lo que todo el sector comenzó a ser conocido como El Labrador, y así se mantiene hasta la actualidad incluso de manera oficial en los documentos municipales. Aunque lamentablemente la construcción de un intercambiador para reducir el tráfico en la década de 1990 terminó por dejarlo aislado del entorno y oculto del ojo de los quiteños.

En 2019 la superficie entera del monumento fue pintada con un patrón de hojas coloridas como parte del proyecto Chacanas Urbanas, impulsado por la Empresa Metropolitana de Obras Públicas y la Corporación Cultural DLAK' para ganarle espacio a los grafitis vandálicos. El concepto de la iniciativa, en conjunto con la pintura mural del paso a desnivel, era plasmar la cosecha y la naturaleza.

Descripción

Redondel del Labrador (1980).
Imagen: Gotti Ryter.
El Monumento del Labrador es un conjunto escultórico de estilo modernista, última obra de arte público realizada por el célebre escultor ibarreño Luis Mideros Almeida, quizá el más importante artista ecuatoriano de su tipo en el siglo XX. Está compuesto por dos pesados bueyes que arrastran un apero mientras un campesino los guía en la faena de labranza, este último elemento bien podría representar al propio padre del artista, Manuel Federico Mideros, quien fue comerciante y agricultor en Imbabura. 

La estructura está fabricada en cemento y tiene 3 metros de alto por siete de largo, descansando en una plataforma de hormigón rodeada por vegetación para representar el arado del campo. La superficie enlucida es constantemente reemplazada y pintada para preservar el monumento del daño natural y el vandalismo, lo que le resta originalidad.


Galería

Saxofonista Olmedo Torres frente al Labrador
Imagen: Quito, fotografías antiguas.

Bueyes del Labrador y avión en la pista del Aeropuerto
Imagen: archivo personal.

Monumento del Labrador con avión en el aire (1980)
Imagen: Gotti Ryter.


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